Los problemas con el tabaco conllevan un importante problema de salud y relacionado con varias enfermedades crónicas.
Un reciente estudio de un Instituto alemán expresa que los fumadores tienen más transtornos de sueño que los no fumadores, los fumadores tardan más tiempo en iniciar y mantener el sueño, duermen menos tiempo y tienen un aumento de la somnolencia y el cansancio diurno.
Tanto las apneas o los ronquidos mientras dormimos, generan fraccionamiento del sueño, impidiendo el sueño reparador, cuya falta excesiva del mismo genera cansancio.
Estos problemas también afectan a los niños, convertidos en fumadores pasivos.
El tabaquismo pasivo genera enfermedades relacionadas con el sueño y pueden ser consecuencia de la exposición al humo antes y/o después del nacimiento.
La placenta de las embarazadas que están expuestas al humo del tabaco presenta alteraciones que condicionan un mayor número de complicaciones durante la gestación.
Prevenir es importante para cesar el uso del tabaco y recuperar los beneficios de una calidad de vida.
Recuerda que todo esto va unido a disponer de un buen sistema de descanso que te ayude a conciliar mejor tu descanso y despertarte perfectamente todas las mañanas.